Ellas son algunas de las más importantes de la
historia y una parte de su infinito ser se repasa en las siguientes líneas.
En su casa-estudio de Coyoacán (lo que hoy
se conoce como la Casa Azul) Frida Kahlo, una
de las mejores pintoras de la historia, se encuentra ejecutando un lienzo.
Atada a corsés, aparatos ortopédicos y demás incómodos aditamentos que intentan
aliviar un poco su dolor, su expresión facial es de profunda concentración.
Su terapia personal a través del pincel y
el lienzo es la manera más eficaz que conoce para dar rienda suelta a sus penas
y expresar todo lo que hay en ella. Clasificada como surrealista, su arte fue más allá de lo onírico:
«Nunca pinté sueños. Pinté mi propia realidad», dijo.
La fantasía o la exploración del
inconsciente es otra manera de acercarse a la realidad. Frida lo sabe y por ello
se afana en seguir hasta que el lienzo le diga ¡detente! Necesita explorar su
dolor, conocerlo, expulsarlo y transformarlo en arte. Sólo así las preguntas se
convierten en respuestas.
Cada una de las pintoras de esta lista
llegó al arte a través de diferentes caminos y motivos. Pero todas
trascendieron el tiempo y hoy son ejemplo de calidad, lucha y pasión en el
mundo de la creación pictórica. Ellas son algunas de las más importantes de la
historia y una parte de su infinito ser se repasa en las siguientes líneas.
Caterina van Hemessen
(1528 – 1587)
Holanda
Fue la primera artista en la historia en
idear un autorretrato del artista frente a su caballete, una práctica que
después se volvería muy común en la historia del arte. Se sospecha que fue instruida
por su padre, el pintor Jan Sanders van Hemessen. Caterina desarrolló sobre
todo una carrera como retratista de hombres adinerados que contrataban sus
servicios para esta clase de obras, tan comunes en la burguesía de todos los
tiempos. Detuvo su carrera como artista cuando en 1554 contrajo matrimonio,
algo común en aquella época en la que la mujer tenía que seguir los
lineamientos de su marido.
Artemisia Gentileschi
(1593 – h.1654)
Italia
Es reconocida por sus retratos y escenas
con heroínas bíblicas con un acentuado claroscuro que hace más dramáticas sus
obras. El hecho de que destaque la presencia femenina en su arte la sitúa
incluso como una de las primeras defensoras del papel de la mujer en la
sociedad y el arte. Uno de sus grandes logros fue haber sido la primera mujer
en ingresar en la Accademia del Disegno de Florencia,
rompiendo así una tradición que impedía a las mujeres formar parte de dicho
lugar.
Louise Élisabeth Vigée
Le Brun (1755 – 1842)
Francia
Fue la retratista personal de María
Antonieta y llegó a pintar a la reina y a su familia más de 30 veces. El total
de su obra se cuenta aproximadamente en 600 retratos y 200 paisajes. No sólo
sirvió a la corte francesa sino que se dedicó a viajar con su hija por gran
parte de Europa (cuando la Revolución en su nación estalló) para hacer trabajos
por encargo a tiempo completo. Eso la hizo famosa y la ayudó convertirse en la
artista más cotizada y buscada por las diversas cortes del Viejo Continente.
Mary Cassatt (1844 –
1926)
Estados Unidos
Fue sobre todo conocida por sus pinturas y
grabados cuyos principales personajes eran mujeres con sus niños o en cualquier
otro acto social. El gran Edgar Degas fue su mentor cuando Cassatt viajó a
Francia en contra de los deseos de sus familia. Su obra impresionista se ganó
el respeto de la crítica tanto en Francia como en los Estados Unidos, país al
que introdujo el impresionismo cuando regresó a él. A causa de una
repentina enfermedad que le hizo perder la vista, se retiró del mundo del arte.
Georgia O’Keeffe
(1887 – 1986)
Estados Unidos
Sus obras más famosas
son las series de flores a gran escala y los paisajes del desierto. A pesar de
tener toques impresionistas y abstractos, la obra de O'Keeffe no se adscribe a
algún movimiento o tendencia particular. Fue esposa del fotógrafo Alfred
Stieglitz, con quien formó una de las parejas del mundo del arte más admiradas
y famosas. Hoy la obra de esta pintora estadounidense forma parte de la
herencia cultural de ese país.
Tamara de Lempicka
(1898 – 1980)
Rusia
Se le conoce sobre
todo por su gran habilidad dentro de la corriente conocida como art decó con
una clara fascinación por las figuras femeninas, el lujo, el mundo de la moda y
un marcado erotismo. Ella misma era una mujer que gozaba del lujo, la
sofisticación y una imagen de femme fatale que la distinguió
toda su vida. Es de sobra conocido su estilo geométrico y glamuroso que en los
Estados Unidos no fue tan bien recibido como en Rusia o en Francia.
Frida Kahlo (1907 –
1954)
México
Un icono del arte que trascendió fronteras
para instaurarse como figura de la cultura pop en gran parte del mundo.
Admirada por artistas y simpatizantes de movimientos feministas, la pintura de
Frida (con elementos surrealistas, naïf y folclóricos) habla
sobre los dolores físicos y morales que padeció a lo largo de su existencia. A
causa de su apasionado y también doloroso matrimonio con el muralista Diego
Rivera, Kahlo encontró en la pintura la vía ideal para plasmar sus angustias y
su visión del mundo, el cual navegaba entre la alegría pero también en una
profunda decepción.
Remedios Varo (1908 -
1963)
España (naturalizada
mexicana)
Casi ignorada en su
país (España), México tuvo la fortuna de recibir a una de las pintoras más
fascinantes del mundo y ser el territorio donde desarrollara la mayor parte de
su obra. Su surrealismo es exquisito al mismo tiempo que siniestro: en sus
pinturas se percibe el verdadero sentido de lo oculto y lo mágico. Sus
personajes habitan mundos alucinantes donde la alquimia es la ciencia dominante
y los sueños son la materia prima para transformar lo irreal en realidad. A los
55 años murió dejando un legado que nos invita a aislarnos de la realidad para
conocer dimensiones paralelas llenas de belleza absoluta.
Leonora Carrington
(1917 – 2011)
Inglaterra
(naturalizada mexicana)
Fue en el momento en que conoció a Max
Ernst y se hizo su amante, que Carrington se metió de lleno al movimiento
surrealista en París, del cual es una de sus mejores exponentes tanto en forma
como en contenido. En 1942 viaja a México para buscar asilo y traba una amistad
profunda con otras surrealistas: Frida Kahlo y Remedios Varo. Su fascinante
obra mezcla varios elementos: las teorías de Jung, lo sobrenatural, lo
fantasmagórico, lo siniestro, lo esotérico y un simbolismo que llena de
misterio y profundidad cada una de sus pinturas.
Helen Frankenthaler
(1928 – 2011)
Estados Unidos
Una de sus principales influencias fue el
estilo de Jackson Pollock, Willem de Kooning y Clement Greenberg. Alcanzó una
notoriedad en el movimiento del expresionismo abstracto a través de la técnica
denominada soak stain, la cual consiste en licuar la pintura al
óleo con aguarrás para dejar que la tela sin tratar absorba los elementos. De
esta manera se eliminaba cualquier sensación tridimensional en la tela y ésta
se convertía en parte fundamental de la obra en lugar de ser sólo un recurso.
Fue compañera de Rufino Tamayo en la Escuela Dalton.
Su fuerza, imaginación
y pasión por el arte han sido fuente de inspiración para que otras mujeres
sigan explorando el fascinante juego de la creatividad. Sin duda, nombres como Leonora Carrington o Remedios Varo seguirán
siendo referentes no sólo en la corriente surrealista sino en el arte de todos
los tiempos. La mujer no es sólo musa sino la puerta a través de la cual el
arte sigue colándose para demostrar que es una necesidad básica de conocimiento
y reflexión.
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